No se preocupen, guerreros del invierno: añorarán el frío con prendas de punto que se ven tan bien. Los bordados intrincados graban motivos caprichosos en las sudaderas de algodón, mientras que los estampados de hadas, jacquards y eslóganes significan que los clásicos siempre vienen con algo un poco extraordinario. La opulenta chenilla, las rayas de lúrex y los volantes con volantes son una declaración de un básico, mientras que los frentes cruzados y las mangas llamativas esculpen siluetas inesperadas.